sábado, 11 de noviembre de 2017

Yokozawa Takafumi no baai Vol.6 Capítulo 11 Parte 3

Publicado por Haruna Stonecraft en 16:31



Tipo de Texto: Retraducción de novela
Clasificación: +18
Título: Yokozawa Takafumi no baai Vol 6
Serie: Sekai-ichi Hatsukoi
Autor: Fujisaki Miyako
Ilustraciones: Nakamura Shungiku
Fuente: September Scanlations
Retraducción: Haruna


Capítulo 11- Parte 3








Desde que había empezado la semana, Yokozawa cada vez lo tenía más difícil para encontrar oportunidades de hablar con Kirishima. Así llevaban varios días sin haber podido verse cara a cara. Por supuesto, se enviaban mensajes e emails, pero no habían conversado realmente en días.

Hiyori, por su parte, había pasado la semana con sus abuelos y, por lo visto, en algunas noches la madre de Kirishima pasaba la noche en su casa. Por lo tanto, Yokozawa no podía simplemente aparecerse a cualquier hora como solía hacer. Así que tampoco había podido ver a Hiyori o a Sorata.

Sin embargo, aquella situación, tristemente, no era inusual. Incluso Kirishima, que solía esforzarse por irse del trabajo a tiempo cada día, se veía desbordado de cosas que hacer para el final de cada ciclo del mes. Con la inminente feria por la que preocuparse para más inri, Yokozawa tampoco tenía un segundo para respirar tampoco.

-…¿Eh?

Se esforzaba por entender lo que su jefe le estaba diciendo, pero los engranajes de su mente parecían estar atascados. Había sido llamado a la oficina de su superior porque debían “hablar”.

Ignorando el momento de confusión de Yokozawa, el hombre continuó.

-Todo esto simplemente está en el aire por ahora, no hay nada decidido. Pero estamos seguros de que tú eres el hombre perfecto para este trabajo. Querríamos que pudieras emplear mejor las habilidades que has perfeccionado en la División de Manga en otra parte. Así que, dado el caso, deberías estar preparado.

-Entiendo…

-Aunque por supuesto no haremos ningún cambio hasta que al menos haya acabado la feria. Así que tampoco hace falta que te preocupes por este futuro lejano. Tan solo céntrate en lo que tienes ahora entre manos.

-Entendido, señor.- Respondió desaminado para después abandonar la oficina algo aturdido. Por patético que pareciera, aún no había sido capaz de asimilar lo que acababa de pasar.

Tal y como parecía dejarlo caer su jefe, pretendían cambiarlo de división. Pasaría desde la sección de Manga, donde se encontraba ahora, a la de Literatura. Aun si nada estaba decidido totalmente, el hecho de que se lo estuvieran sugiriendo de esa forma quería decir que estaba cerca de estarlo.

Y no era una idea del todo extraña, sino todo lo contrario de hecho. Era inaudito que solo hubiera trabajado en Manga desde que se uniera a la compañía.

-Así que literatura…

No se quejaba del nuevo puesto que pudiera ocupar, en realidad. Tan solo… había estado dentro de su división por tanto tiempo, que sentía que sería difícil despedirse de su trabajo.

No había nada que pensar al respecto, tan solo tenía una opción. Como empleado de una compañía no tenía más remedio que cumplir con las políticas de esta. No siempre podría tener la suerte de hacer el trabajo que él quisiera. Ganaba su salario haciendo cualquiera que fuera el trabajo que le encargara la empresa, así que si Recursos Humanos decidía que debía estar en otro lado, tenía la obligación de obedecer. Aun si no estaba contento con dicha obligación.

Mirándolo por el lado bueno, al menos no había sido transferido de Ventas en sí. A su parecer Ventas y Marketing eran su fuerte. Jamás habría podido encajar en la Sección de Edición o Gáficos, apartamentos que requerían cierto talento creativo. Además de que no se veía haciendo papeleo en los departamentos de producción. Un trabajo que requería movimiento era definitivamente lo mejor para alguien a quien le encantaba esforzarse en su trabajo como a Yokozawa.

-Oh, ya ha llegado, ¡Yokozawa-san! ¿Qué quería el jefe?

Yokozawa se quedó sorprendido un momento por la inocente pregunta de Henmi.

-¿Eh? Oh, eh, tan solo quería saber cómo van las preparaciones de la feria.- Habían hablado de la feria también al fin y al cabo, así que no era una mentira del todo. Lo mejor sería no hablar de la posibilidad de cambiar de división con Henmi hasta que estuviera totalmente decidido.

-¡Solo falta un mes para que empiece! Aunque me está dando algo de pensar en todo el trabajo que queda por hacer todavía. Ya es bastante difícil hacer que salga una feria normal, ¡pero es que esta vez hay tanta gente involucrada!

Los géneros habitualmente preparaban ferias individuales a finales de año, pero aquella vez, la compañía entera de Marukawa Shoten estaba cooperando para hacer una feria todos juntos, tal y como había dictado el presidente de la compañía en su intento por tender puentes entre los distintos géneros. Quería que los lectores vieran expuestos ante sí géneros que quizá nunca habían tratado y por lo visto, tenía muchas ideas sobre cómo conseguir que saliera algo tan complicado como aquello.

Sin embargo, aunque los espectadores pasivos pudieran ver aquella feria como algo divertido, como un festival encantador, para Yokozawa, el encargado de coordinar aquel percal, todo este asunto le había resultado ser la fuente de muchos problemas.

-Supongo. Aunque al principio tenía serias dudas de que pudiéramos sacar esto adelante, parece que todo se está llevando bastante bien en la compañía. Aunque debo empezar a centrarme en Za Kan.

Además de la feria de invierno que se avecinaba, ya había planes de una promoción aparte para promocionar las ediciones anteriores de Za Kan y la película que se estrenaría pronto. Eso, combinado con el hecho de que se sacaría un nuevo volumen antes de que sacaran la película, significaba que la campaña sería especialmente llamativa.

Sería una oportunidad fantástica para aprovecharse del estreno de la película para aumentar las ventas del manga. Sacarían portadas nuevas para los volúmenes antiguos, pondrían en marcha promociones en el volumen nuevo y en la revista, y extenderían su dominio por las librerías asociadas. Y sería imposible tener éxito en aquel plan si la incalculable ayuda del departamento editorial. Ahora que se habían asegurado acuerdos para cooperar con varias cadenas de librerías estaban planeando en avanzar por el país con la promoción. De la misma forma, la producción de posters y paneles para la campaña ya estaban en marcha.

-¡Oh, cierto! ¡También hay que encargarse de eso! Ya están en la última fase de revisión de la película, ¿no? ¡Tengo muchas ganas de verla en los cines!

-Tendrán la premiere pronto.

-¿Va a ir a verla?

-Si tengo tiempo sí.

-¡Genial! A mí también me encantaría ir…

-Pues es tu día de suerte. Me dijeron que podía invitar a gente de ventas, así que pregunta por ahí si hay alguien más interesado en verla.

-¡Qué suerte! ¡Ahora sí que tengo ganas de verla!

-Parece que quieren oír opiniones objetivas para estar seguros de haberlo hecho bien.

-No pienso perderme un solo fotograma de la película, voy a actuar como un auténtico crítico de cine, listo para dar una reseña. Y ahora que lo pienso, ¿qué pasó al final con los planes de promoción que tenían que ver con el nuevo embalaje y el lanzamiento de los volúmenes.

-Nada está decidido aún. Todo el mundo está liadísimo preparando el estreno de la película. Aunque me gustaría tener al menos una idea aproximada de sus planes…

Los departamentos de publicación y animación estaban totalmente separados, lo que significaba que los representantes de ventas estaban apartados también. La mezcla de medios implicaba la participación cooperativa de múltiples plataformas, lo que requería trabajar con divisiones con las que nunca habían tratado para realizar el trabajo. Aquello resultaba más fácil decirlo que hacerlo, pero por supuesto, el resultado merecería la pena.

-¿Debería trabajar en algunas propuestas por mi cuenta? La audiencia a la que va destinada la película son los lectores del trabajo original, ¿no? Así que no creo que se alejen mucho de eso.

-Así es. Piensa en algo si tienes tiempo. No podemos dejar que se nos pase esta oportunidad de aumentar las ventas.

-¡Déjamelo a mí!- Entonces Henmi se dio la vuelta completamente animado, rebosante de confianza y energía. Había sido una persona más bien inexperta (aunque muy motivado), cuando recién había entrado a la compañía, pero ahora, Henmi era bastante confiable, y Yokozawa reconocía que poco le quedaba por enseñar al chico.

-Has estado bastante animado últimamente. ¿Te ha pasado algo bueno?- Echando la vista atrás, Henmi había estado de un buen humor bastante sospechoso la última semana. Siempre había sido una persona alegre, pero últimamente había estado especialmente contento.

-Vaya, ¿Te has dado cuenta?- Sus ojos parecieron brillar, y Yokozawa se encontró a sí mismo caminando hacia su particular trampa. Henmi parecía estar más que dispuesto a tratar su vida privada.

-No es que me haya dado cuenta sino que… bueno, es bastante evidente…- Yokozawa estaba empezando a arrepentirse de haber preguntado. Debería haberse quedado callado.

-De hecho… ¡Me he echado novia! ¡La conocí a través de un amigo en común, y es maravillosa! Nos llevamos bien, nos gustan los mismos autores-

-Vale, vale. Ya he escuchado suficiente sobre ella.- Le cortó antes de que se fuera todavía más por la tangente.

Henmi se calló poniendo cara triste.

-Jo, podrías haberme escuchado un poco más…

-Sí, sí, en otro momento.- No podían malgastar tiempo en conversaciones de ese tipo estando en la oficina. El lugar de trabajo era exactamente eso, un espacio para trabajar.
Por un segundo, la cara de Kirishima apareció en su mente. De repente recordó todos los ridículos tejemanejes que se había traído hasta entonces, aunque bien era cierto que al menos hasta el momento no había afectado al trabajo. En su opinión, el trabajo era un lugar donde uno tenía que evitar dichas historias, y él, por su parte, siempre se esforzaba por resistirse a Kirishima. Tampoco era como si se hubiera rendido ante él voluntariamente.

Inmediatamente se dio cuenta de cómo intentaba desesperadamente quitarse responsabilidad frente a sus acciones, lo que solo hizo que se sintiera peor.

-¡Vale, pero la próxima vez que salgamos a beber tienes que escucharme sí o sí!

-¿Por qué te interesa tanto hablar de ella?

-No lo sé… Supongo que tan solo quiero compartir mi felicidad.

-Entonces ni aunque me paguen.- Respondió retirando al momento su oferta de salir a beber. Habiéndose echado novia, Henmi parecía estar rodeado por un halo de felicidad y alegría.

-¡Qué cruel! ¡Fuiste tú el que preguntó, Yokozawa-san!

-Nunca dije que quisiera escucharte parlotear sobre tu novia.- Él simplemente había preguntado por qué parecía estar tan animado, pero no le interesaban los detalles en realidad. Y tampoco quería que Henmi se hiciera una idea equivocada.

-Esto no es “parlotear”, es simplemente… ¡un anuncio!- La forma en la que hablaba tan seriamente de cosas que la mayoría de la gente tan solo susurraría en momento de media inconsciencia no dejaba lugar a dudas: estaba demasiado radiante y feliz. Si dejaba a Henmi a su aire, se dejaría llevar en seguida, así que Yokozawa decidió no darle pie a nada más en ninguna conversación futura.

-Qué más dará. Deja de hablar y vuelve al trabajo.

-Sí, señor~

Haciendo uso de su propio consejo, Yokozawa se acomodó frente a su escritorio y abrió su email, dándose cuenta de que tenías muchos sin leer que reclamaban su atención en distintos asuntos. ¡Demasiados mensajes para haber estado apartado de su escritorio apenas unos minutos! Rápidamente los miró por encima decidiendo responder aquellos que parecían más urgentes.

En medio de esos mensajes sin leer había uno de Kirishima. Por su aspecto parecía uno relacionado meramente con el trabajo, el cual hablaría solo de asuntos de poca importancia. Pero aquello fue más que suficiente para recordarle los sentimientos encontrados que había estado intentando evitar.

-…

Ahora mismo, su trabajo era vender mangas. Aun si era trasladado a literatura, podría usar sus habilidades en la sección de manga para vender libros. Pero a pesar de saber que darle vueltas y vueltas al asunto no cambiaría nada, no podía evitar seguir pensando en ello.

Ya que al fin y al cabo la razón por la que se sentía tan reticente a aceptar ese cambio de puesto… era por sus sentimientos. A pesar de saber, lógicamente, que no había nada que pudiera hacer.

¿Qué le diría Kirishima en una situación así?

En apariencia podía parecer que se comportaba de forma infantil a menudo, pero en el trabajo, él era el Editor Jefe, el cual tenía a su cargo un equipo de editores. Aquí, mantenía el rostro severo de un superior, algo muy alejado de su personalidad en su vida personal.

Quizá intentaría convencer a Yokozawa de simplemente aceptar la situación… Aquello no era algo por lo que necesitara molestar a Kirishima o discutir con él, pero si pudieran al menos hablarlo un poco aunque fuera, quizá podría relajarse de alguna manera.

Pero en seguida recordó lo ocupado que estaba Kirishima en esos momentos. -…Está increíblemente ocupado ahora…-. Incluso le había dicho a Yokozawa el último fin de semana que estaba desbordado de trabajo para los próximos días por el lanzamiento de la película. Incluso Hiyori, una alumna de primaria, se había ofrecido a quedarse con sus abuelos. No era el momento para que Yokozawa, un adulto hecho y derecho, se comportara como un malcriado.

-¿Ha dicho algo, Yokozawa-san?- Ante la pregunta de Henmi, Yokozawa se dio cuenta de que había estado murmurando para sí. Quizá todo este asunto había sido un shock más grande de lo que había creído.

-No es nada. Perdona, pero necesito salir un momento. Si alguien llama diles que les devolveré la llamada pronto.

-Entendido.

Entonces se levantó, dejando a Henmi mirando otras cosas y, con su móvil  y su monedero en mano, se dirigió a la sala de descanso de la tercera planta. Si se hubiera metido de lleno en el trabajo como solía hacer, se habría olvidado de sus problemas en seguida, pero en esta ocasión, era el trabajo en sí lo que le creaba problemas.

-…Tsk- Inconscientemente empezó a caminar a la sala de fumadores, hasta que se dio cuenta de que no llevaba el tabaco encima. Aunque en realidad aquellos días había estado evitando fumar. Una razón importante para ese “descanso” de su mal hábito, era su propia salud, por supuesto, pero en realidad, lo había estado haciendo en consideración sobre todo a Hiyori. Era incómodo volver a casa oliendo a tabaco cuando incluso Kirishima parecía no estar fumando aquellos días.

No había notado la necesidad de encenderse un cigarrillo en bastante tiempo, pero hoy se sentía especialmente irritado, y esperando quizá relajarse con algo de cafeína en lugar de tabaco, sacó de su bolsillo su monedero. Se acercó a la máquina de café y pulsó el botón para el café solo para después esperar a que el vaso de plástico se llenara. Justo en ese momento una conversación llegó hasta sus oídos sin querer.

-Hm…?

Parecía que la sala de descanso estaba ya ocupada por alguien. Si se daba la circunstancia de que estaban haciendo algo relacionado con el trabajo, probablemente sería mejor si evitaba molestarlos y se iba a encontrar otro lugar para relajarse. Al echar un vistazo dentro se quedó sin aliento al reconocer a las personas que estaban allí. De pie, con un café en la mano cada uno, hablaban animadamente Kirishima y Yasuda.

-…-

No había razón para haberse puesto tan nervioso, pero sus pies seguían fijos donde estaban. Aquellos dos parecían tener un aura extraña entre ellos, lo que hacía que Yokozawa no fuera capaz de entrar en la sala. Si no pensaba hablarles, entonces debía marcharse a otro lado a descansar, tal y como había pensado antes. Pero por alguna razón, no podía apartar su vista de ambos.

Él sabía que Kirishima veía a Yasuda como nada más que un colega o compañero, y aunque reconocía el talento de Yasuda y a menudo cantaba sus alabanzas, aquello no quería decir que hubiera sentimientos especiales de ningún tipo. Incluso ahora, no estaban haciendo más que estar allí de pie discutiendo asuntos relacionados con el trabajo. Él entendía, en lo más profundo de su ser, que la vida pública y privada de una persona (el trabajo  y los asuntos personales) debían de estar separadas.

-…

Aun así… Yokozawa y Kirishima, en su situación actual, solo tenían la ocasión de hablar, en el día a día, gracias al trabajo. Una vez Yokozawa hubiera cambiado de sección… aquellas conversaciones se verían mermadas a ninguna en absoluto. Le encantaba su trabajo en Ventas de Manga, y no era solo la oportunidad de poder hablar con Kirishima lo que le gustaba de ello, de verdad le encantaba poder trabajar con él.

Trabajar con Takano había sido agradable también, pero Kirishima tenía más edad y experiencia, lo que le dejaba a Yokozawa una sensación completamente distinta a la hora de cumplir con un trabajo bien hecho. Siendo sincero, él de verdad que no quería dejar aquello. Lo que sentía ahora por Yasuda… probablemente eran celos, celos por eso mismo. Tenían algo entre ellos que hacía que se entendieran, probablemente por tener la misma edad, haber entrado a la compañía juntos y haber estado trabajando hombro con hombro durante años.

-Ahora que me acuerdo… Estás al cargo de la serialización de la obra de Oosaki Ryou, ¿no?

-¿Ya te has enterado? Sí que se ha esparcido el rumor deprisa…

Yokozawa acababa de perder la oportunidad de haberse ido como una persona educada sin haber escuchado nada de su conversación. Sabía que aquello estaba mal, pero no podía evitar sentir curiosidad.

-Todo el mundo dice que tengo una facilidad para enterarme de cosas. Oosaki-sensei y tú fuisteis juntos a la universidad si no me equivoco.

-Espera, ¿también sabes eso? ¡Si yo acabo de enterarme gracias a Chiba-san!- Chiba debía de ser el editor de Oosaki. Por el aspecto de la conversación parecía que Yokozawa no había conocido al autor personalmente todavía. Aun así, era ya bastante sorpresa escuchar que Kirishima y el autor ya se habían conocido. Kirishima mismo parecía sorprendido al respecto, ¿pero cuan cercanos habían sido?

-Debéis haber sido bastante cercanos para que Oosaki-sensei pidiera que te encargaras personalmente del manga de su obra.

-Para nada. Quizá nos cruzaríamos en alguna asignatura, así que nos debimos de ver en alguna ocasión, pero fuera de clase nunca hablamos para nada. Nunca vino a beber con nosotros así que no tengo ni idea de qué hizo después de la universidad.

-Entonces parece que no sois más que antiguos compañeros de clase…

-Básicamente. No solía salir mucho con chicas entonces.

-Espera, ¿Oosaki Ryou no es un hombre?

-Si el nombre real que me dio Chiba-san es correcto, ten por seguro que es una mujer.

-Vaya, no tenía ni idea. Sus obras de su debut eran thrillers de suspense bastante oscuros, así que simplemente asumí que era un hombre. ¿Qué tipo de mujer es?

-Sé que decir esto me va a hacer sonar como una persona horrible, pero realmente no recuerdo cómo era. Vagamente me suena que era un poco ratón de biblioteca, llevaba gafas, me parece. Siempre tenía un libro delante de ella.

-¿Eh? ¿Esa era toda la relación que teníais y aun así ella ha ido expresamente a pedir que tú llevaras la serialización de su obra? Yokozawa asintió en silencio a las palabras de Yasuda, aquella no había sido una petición normal. Marukawa había estado desesperada por conseguir el permiso para lanzar diferentes formatos de los trabajos de Oosaki, y la participación de Kirishima había sido una condición sine qua non para obtener la aprobación final. Aunque en realidad, Kirishima nunca había tenido la posibilidad de rechazar el trabajo.

-También me suena raro a mí. Aunque quizá, no sé… ¿lo mismo se siente un poco nostálgica por la universidad?

-Me parece que solo eso es poca razón para ponerse tan sentimental en un proyecto de trabajo… Oye, ¡quizá estaba colada por ti!

-¡!- Yasuda soltó como si nada la sospecha que había estado rondando la mente de Yokozawa. Su cuerpo entero se congeló ante la franqueza con la que el hombre había hablado, sin callarse nada.

-Nah, no creo. Quiero decir, apenas hablamos en su día. Dudo mucho que sea por eso.

-Oye, todas las personas que han intentado seducirme a mí nunca antes habían hablado conmigo, ¿te das cuenta?

-Por favor, ni se te ocurra buscar paralelismos entre nosotros dos. Además, cada persona que intenta algo contigo más bien quieren convertirse en tu esclavo.

-Valientes palabras de un hombre al que solo persiguen acosadores locos. Aunque me parece que por fin has encontrado a alguien que merece la pena. Eso sí, tengo que admitir que el hecho de que sea un hombre al principio me impactó.

El comentario de Yasuda envió un escalofrío a través de la espalda de Yokozawa. La persona que “merecía la pena” era el propio Yokozawa.

Dándose cuenta de que no podía seguir escuchando a escondidas, se bebió lo que quedaba de su café ya frío y giró sobre sus talones para marcharse. Ahora estaba bastante más nervioso que cuando había ido para allá.

-…

Su cabeza estaba echa un lío, ¿pero por qué estaba sintiéndose tan molesto? Aun si no hubiera tenido el problema de tener que cambiar de puesto, igualmente se habría incomodado por el tema de conversación entre Kirishima y Yasura. Y por supuesto a ello tenía que sumar el hecho de que no se sentía del todo tranquilo con la relación que tenían ellos dos para empezar. Él nunca había sido del tipo tranquilo. Eso lo sabía. Pero aun así, ¿siempre había sido tan corto de miras, haciéndose ideas locas en la cabeza a la primera de cambio?

Parecía que nada había cambiado en aquellos meses al estar con Kirishima, y sentía una punzada de irritación ante su completa falta de compostura ante la situación. Quizá sería mejor si…. Si pusiera algo de distancia entre ellos, para aprender a manejar su vida pública y privada. De esa forma podría evitarse repetir los errores que había cometido antes.

Estando allí de pie, discutiendo consigo mismo, escuchó a alguien llamar su nombre.

-Yokozawa.

-¡!

El hecho de que fuera Yasuda quien le llamara fue lo que más le sorprendió. Se giró mientras intentaba disimular su incomodidad.

-¿Necesitabas algo?- Enfrentarlo cara a cara le hizo recordar cuan atractivo era aquel hombre, aunque poco a poco parecía empezar a acostumbrarse.

-¿Qué pasa? ¿Necesito una razón en concreto para hablar contigo?

-No, no quería decir eso…

-Bueno, en realidad que tengo una razón. ¿Te importaría hablar un momento conmigo?

-¿Eh?- Respondió tontamente a la pregunta inesperada.

-So…sobre qué?

-Si no te das prisa Kirishima nos va a pillar.

-¡!

Ante la urgencia de Yasuda, acabó metiéndose en el ascensor con él.


Continuará…


9 comentarios:

  1. muchas gracias es fabulosa su traducción espero lo continuen

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  2. Es muy buena esta historia será por el cariño enorme q le tengo a los Mangas pero la trifecta es preciosa!!

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  3. gracias espero la continuación y hay link de descarga?

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  4. muchas gracias por la traduccion.me preguntaba, se seguira traduciendo? por las fechas de los comentarios ya no hay mas o si estan perono lo veo??

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  5. Qué hermosa novela! Gracias a las traductoras. Yo tampoco veo la continuación buuu

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  6. Uwaaaa
    Esta pareja me encanta, me fascina, me enamora!!!! son tal lindos juntos y Kirishima debe tener tanta paciencia para amar a Yokosawa.

    Muchas gracias por tu trabajo.
    No debe ser nada fácil traducirlo.
    Espero que pronto haya una continuación

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